Estructura del Documento
- iforensis
- 20 feb 2016
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Documento:
Un documento es la prueba o testimonio material de un hecho o acto que una persona física o jurídica, una institución, asociación, etc., que puede ser de carácter público o privado, realizan como consecuencia del ejercicio de sus actividades y funciones y que podrá ser plasmado en una unidad de información que observe cualquier soporte, papel, cinta, disco magnético, película y fotografía, con el objeto de preservarlo en el tiempo en caso de necesitarlo para presentarlo como prueba, recuerdo o legado a alguien.
Un documento está compuesto preeminentemente por información escrita que puede haber sido volcada de puño y letra, o sea, manuscritamente, o bien a través de un proceso mecánico como puede ser el de la máquina de escribir que se usaba masivamente antaño o por la computadora, que es aquel medio mecánico que predomina hoy en día.
... via Definicion ABC http://www.definicionabc.com/general/documento.php
Un documento, de acuerdo con lo expuesto, no es más que un mensaje inscrito en la materia, una información materializada.
Consta, en consecuencia, de dos clases de elementos :
* De dos elementos esenciales o estructurales: el corpus o ingrediente material, y el animus, o contenido ideal.
* De tres elementos accidentales o referenciales: uno de índole subjetiva, el autor, y dos objetivos: la fecha y el lugar de su elaboración.
El corpus es la cosa material que recoge la información, algo así como su recipiente o envoltura perceptible.
La componen, a su vez, dos ingredientes fundamentales:
* Un sustrato fisicoquímico, formado por sus elementos tangibles o perceptibles, por el que podríamos denominar su infraestructura material.
* Unos elementos alegóricos de carácter declarativo, simbólico o simplemente representativo.
El sustrato corpóreo del documento escrito está constituido por el asiento o sostén de sus diferentes inscripciones –generealmente una hoja de papel- y, en las grafías pictóricas, por los pigmentos o colorantes que las hacen visibles. Los elementos alegóricos, a su turno, por las imágenes, figuras, símbolicos o signos gráficos inscritos.
El animus es el contenido ideal o informativo de la pieza , su mensaje. Lo que ésta registra o comunica.
En el examen integral del ejemplar hay que establecer , efectivamente, no solo qué se dijo en él –el mensaje- sino quién lo dijo, cuándo y dónde , aspectos que juegan un decisivo papel en la determinación de su legitimidad y que se ven, por ello, frecuentemente involucrados en las diferentes modalidades de la acción falsaria.
El autor es el creador del documento, la persona que se vale de este específico medio para consignar o manifestar algo. Los juristas lo consideran, con razón, el elemento responsable de la función garantizadora de la pieza. El grafotécnico, sin embargo, identifica más al autor material o inmediato (el amanuense) que el autor intelectual o creador inmediato del documento.
Junto al elemento autoría, componente referencial del carácter subjetivo, hay que considerar en el escrito dos ingredientes objetivos, también accidentales o referenciales, constitutivos de su entorno o contexto espacio-temporal: el lugar y la fecha de expedición o creación. El marco histórico y geográfico del documento, en otros términos.
Un cuadro sinóptico sintetiza estos planteamientos:

Velásquez Posada, Luis G., Falsedad documental y laboratorio forense, 1ª ed. Buenos Aires, La Rocca. 2004, ISBN 987-517-060-0. p. 143-144
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